Báscula tu pelvis: descubre cómo mejorar tu postura y bienestar

¡Hola a todos!

Hoy quiero hablarles sobre un tema que puede ser muy importante para nuestra salud y bienestar: la basculación pelvica.

La pelvis es una estructura ósea que forma parte de nuestra anatomía y que tiene una gran influencia en el funcionamiento de nuestro cuerpo. Cuando hablamos de basculación pelvica, nos referimos a un desequilibrio en la posición de la pelvis que puede generar diferentes problemas, desde dolores de espalda y cadera hasta alteraciones en la respiración y la digestión.

Es importante entender que la basculación pelvica no es una enfermedad en sí misma, sino una condición que puede tener diferentes causas y que requiere de una evaluación y tratamiento adecuados para solucionarla.

En este artículo, vamos a profundizar en lo que es la basculación pelvica, cuáles son sus síntomas y causas más comunes, y qué podemos hacer para prevenir o corregir esta condición.

¡Comencemos!

Desnivel pélvico: ¿Problemas posturales?

Si bien la basculación pélvica puede ser una de las causas de los problemas posturales, el desnivel pélvico también puede ser una de las razones por las cuales se produce esta basculación.

El desnivel pélvico se refiere a una desalineación en la posición de la pelvis, es decir, una cadera más alta que la otra. Esto puede ser causado por diversos factores, como una pierna más larga que la otra, una lesión o una escoliosis.

El desnivel pélvico puede afectar la postura y la estabilidad del cuerpo, provocando dolores en la espalda, cuello y hombros. Además, puede generar una sobrecarga en ciertos músculos y articulaciones, lo que puede llevar a la aparición de lesiones.

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Por lo tanto, es importante detectar y tratar el desnivel pélvico para evitar problemas posturales y lesiones a largo plazo. Un profesional de la salud, como un quiropráctico o fisioterapeuta, puede ayudar a corregir esta desalineación mediante ejercicios específicos y ajustes manuales.

Busca ayuda de un profesional de la salud para su tratamiento.

¿Músculo clave en basculación de cadera?

El músculo clave en la basculación de cadera es el músculo iliopsoas. Este músculo se compone del ilíaco y el psoas mayor, y se encuentra en la parte anterior del abdomen y parte superior del muslo.

El iliopsoas es el músculo encargado de la flexión de la cadera y también juega un papel importante en la basculación de la pelvis. Cuando se activa, tira del fémur hacia la pelvis, lo que causa una inclinación anterior de la pelvis, lo que se conoce como basculación anterior de la pelvis.

Por lo tanto, para una correcta basculación de la pelvis es necesario que el músculo iliopsoas esté bien activado y en forma. Si este músculo está demasiado tenso o debilitado, puede afectar la basculación de la pelvis y causar problemas en la postura y el movimiento del cuerpo.

Es importante trabajar en la flexibilidad y la fuerza del músculo iliopsoas para mejorar la basculación de la pelvis y prevenir lesiones en la zona lumbar y la cadera. Ejercicios como la elevación de piernas rectas, las sentadillas y el estiramiento de la cadera son excelentes para fortalecer y estirar este músculo clave.

¿Qué es el movimiento bascular?

El movimiento bascular es una técnica utilizada en fisioterapia y osteopatía para tratar diversas dolencias relacionadas con la pelvis y la columna vertebral.

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La basculación se refiere a un movimiento de inclinación hacia adelante o hacia atrás de la pelvis, que a su vez afecta a la posición de la columna vertebral.

Esta técnica se realiza mediante la aplicación de presión en puntos específicos de la pelvis y la columna, con el fin de liberar tensiones y mejorar la movilidad de la zona tratada.

El movimiento bascular puede ser especialmente efectivo en casos de dolor lumbar, ciática, hernias discales, problemas de cadera y otras dolencias relacionadas con la pelvis y la columna vertebral.

Es importante destacar que el movimiento bascular debe ser realizado por un profesional cualificado, ya que una técnica mal aplicada puede empeorar la dolencia del paciente.

¿Cómo mover la pelvis?

Para mover la pelvis correctamente es importante tener en cuenta varios aspectos. En primer lugar, es fundamental tener una buena postura y una correcta alineación de la columna vertebral. De esta manera, se facilita el movimiento de la pelvis y se evitan posibles lesiones.

Una vez que tenemos una buena postura, podemos comenzar a realizar movimientos específicos para la pelvis. Uno de los más comunes es la basculación pelvica. Para realizarla, debemos estar de pie con las piernas ligeramente separadas y las manos en la cintura.

A continuación, debemos imaginar que tenemos un hilo que tira de nuestra pelvis hacia delante. El movimiento consiste en inclinar la pelvis hacia delante, llevando el ombligo hacia la parte superior de los muslos y arqueando ligeramente la columna vertebral. Este movimiento debe ser suave y controlado, evitando cualquier tipo de dolor o molestia.

Una vez que hemos inclinado la pelvis hacia delante, debemos volver a la posición inicial llevando la pelvis hacia atrás. En este caso, debemos imaginar que el hilo tira de nuestra pelvis hacia atrás, llevando los glúteos hacia atrás y arqueando ligeramente la columna vertebral en sentido contrario.

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Es importante realizar estos movimientos de forma suave y controlada, sin forzar la musculatura ni generar tensiones innecesarias. Además, es recomendable realizarlos de forma regular para mantener la pelvis en buena forma y prevenir posibles lesiones.

¡Y eso es todo por hoy! Espero que este artículo haya sido de gran ayuda para entender la importancia de la basculación pélvica y cómo puede afectar nuestra salud. Si tienes algún comentario, pregunta o experiencia que te gustaría compartir con nosotros, no dudes en dejar un comentario a continuación. Me encantaría saber tu opinión y poder responder a tus dudas. ¡Hasta pronto!

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